Como bien sabemos, cuando se realiza la instalación de fibra óptica subterránea, lo mas recomendable es instalarlo dentro de ductos o microductos para brindar mayor protección al cable.
Pero, y…. ¿Cómo insertamos el cable en el ducto de manera sencilla?
Ya sea que utilicemos la técnica de jalado o la de soplado de fibra óptica, lo primordial es utilizar lubricante para que el cable resbale fácilmente.
El lubricante es un líquido con cierto nivel de viscosidad que facilita la inserción de cable reduciendo considerablemente la fricción dentro del ducto y aumento la distancia de instalación. Es importante mencionar que hay lubricante para jalado y lubricante para soplado de fibra que varían en nivel de viscosidad y adherencia, pero ambos deben contar con al menos las siguientes características:
-No afectar las propiedades de la cubierta o forro del cable y ducto.
-Adecuado para temperaturas en exteriores.
-No propagar la flama.
Para hacer una correcta lubricación de ducto, primero se tiene que revisar que el ducto este uniforme, es decir que no tenga imperfecciones (que el ducto esté ovalado, este doblado, apachurrado e incluso roto o quebrado), segundo, debemos asegurarnos de que el ducto este limpio, ya que la arena y el polvo mezclados con lubricante pueden atascar la fibra y causar fricción lo que afectará la distancia de instalación, y tercero, que el ducto esté sellado herméticamente para que permita el paso del lubricante sin riesgo a fugas.
Figura 1. Sellado de ducto
Hablando del soplado de fibra, la recomendación para lubricar el ducto es insertar una esponja a unos 80 cm aproximadamente, después una porción de lubricante, la cual depende del tamaño, tipo y condición del ducto, sin embargo, el fabricante cuenta con recomendaciones de volumen para que tengas un punto de partida a considerar y para finalizar, se debe insertar otra esponja, lo que permitirá hacer una especie de cámara de lubricado en el interior del ducto haciendo más efectiva la lubricación.
Figura 2. Inserción de esponja
Figura 3. Lubricado de ducto
Podemos decir que, dependiendo de las circunstancias de soplado de fibra, la distancia puede mejorar en un 50% o más con solo limpiar el ducto y lubricarlo.
Seguro has escuchado que también se puede lubricar el ducto usando aceite de cocina, grasa e incluso suavizante de ropa, sin embargo, como hemos visto a lo largo de esta entrada, es de suma importancia hacer uso de los accesorios adecuados para facilitar la instalación y más aún, para evitar dañar el ducto y el cable.
En INCOM contamos con toda la solución para soplado y jalado de fibra óptica, no olvides estar pendiente de nuestras próximas entradas.